Dentro de cada ser humano hay una red de nervios y órganos sensores que interpretan el mundo físico exterior. Al mismo tiempo dentro de nosotros existe un sistema sutil de canales (nadis) y centros de energía (chakras) que cuidan de nuestro ser físico, intelectual, emocional y espiritual.

Cada uno de los siete chakras (representado por una estrella sobre la columna vertebral en el dibujo) tiene varias cualidades espirituales. Estas cualidades residen en nosotros en estado potencial, y aunque nunca se haya manifestado su potencialidad o capacidad de poder despertar, nunca pueden ser destruidos totalmente.

El sistema sutil

El Mooladhara.- Es el primer chakra, está situado debajo del hueso sacro, en el cual reside la Kundalini y su aspecto principal es la inocencia, la inocencia es la cualidad que nos permite experimentar la pureza, gozamos como niños, sin las limitaciones de una mente mal pensante. La inocencia nos atrae hacia lo bello y limpio, nos hace rechazar todo lo destructivo en nuestra

conducta. La inocencia es fuente de equilibrio emocionalLa sencillez y la humildad van de mano con la inocencia hacen de nosotros personas magnéticas cuya belleza interior es siempre grata y bienvenida. La combinación de estas cualidades da como fruto la sabiduría intuitiva que nos permite usar los medios hasta ahora a nuestro alcance para propósitos más elevados. Esta cualidad que existe en todos nosotros sólo está esperando por el despertar de la Kundalini para expresar la belleza y pureza de nuestra inocencia

El Swadhistan (el segundo chakra en sentido ascendente). - es el chakra de la creatividad, del conocimiento puro y de la atención pura. Es el que nos conecta con la fuente interna de inspiración y nos permite contactar con la belleza que nos rodea. El conocimiento puro que este chakra nos otorga no es mental, es una percepción directa y absoluta de la realidad. En este centro se

encuentra nuestra capacidad de concentración, de atención estable. En el plano físico cuida de la parte baja del hígado, de los riñones y de la parte baja del abdomen.

El Nabhi o Manipura (tercer chakra). - Es el que nos da el sentido completo de satisfacción y contento. Es el centro encargado de nuestra paz interior, de nuestra generosidad, y es el encargado de regir de forma correcta lo material. Cuando este chakra ha sido iluminado por la Kundalini expresa la rectitud y un sentido interno de moralidad, dándonos el equilibrio en las diferentes facetas

de nuestra vida.

El Vacío o también llamado el Océano de la Ilusión es lo que en la tradición india se llama babasagarara, y corresponde con el maestro primordial, es

decir, el ser nuestro propio maestro. Nosotros debemos tener la gravedad y el  discernimiento suficiente para saber en todo momento que camino debemos tomar en nuestra vida.

El Anahata o chakra del corazón (cuarto chakra). - Es el lugar de residencia del espíritu, de nuestro verdadero ser. Es desde el corazón que se manifiestan el amor y la compasión. También en el corazón está el sentido de la responsabilidad. En su parte central a la altura de esternón se manifiesta como completa seguridad y confianza en sí mismo. Todos nuestros miedos y

temores se disipan al ser tocado por la Kundalini el chakra del corazón.

El Vishudhi (quinto chakra). - Es el chakra de la diplomacia, este chakra aporta la energía utilizada para comunicarnos con los demás, su buen estado repercute en que: las relaciones sean correctas, que podamos expresar las percepciones del corazón. Este chakra es dañado con los sentimientos de culpa y cuando con nuestra arrogancia culpabilizamos a otros, es decir cuando

se falta a la dignidad propia o ajena.

El Agnya (sexto chakra). - Este centro se encarga del perdón y de trascender de la conciencia mental pensante a la conciencia espiritual sin pensamiento (en sánscrito Nirvichara). Consciencia que nos sitúa en la cuarta dimensión definida así por algunos místicos. El mejor exponente del perdón es Jesús. Sus últimas palabras "perdónales porque no saben lo que hacen" es el mejor

ejemplo de perdón, cuando este chakra se abre entendemos el verdadero significado del perdón al igual que somos conscientes del mal que nos hace el odio y el rencor. Estos últimos son incompatibles con la paz y el amor a los que un ser aspira desde el interior noble de su espíritu.

El Sahasrara (séptimo chakra). - En este chakra se integran los seis anteriores con todas sus cualidades y aspectos. Este chakra es el integrador de todos los aspectos del ser y su buen funcionamiento conlleva la supresión de las dualidades que tanto sufrimiento trae al humano. La humanidad en su globalidad se encuentra ante la posibilidad colectiva de despertar este chakra

cuyo conocimiento hasta ahora era desconocido. A este nivel de conciencia sólo podemos llegar con el despertar de la Kundalini. Hablar de este reino con palabras es muy difícil por que su contenido está más allá de los conceptos de este mundo material. Por dar una pincelada este nivel de conciencia se corresponde con la pura paz, la auténtica compasión el conocimiento más sutil y la auténtica dicha de la existencia. El gozo emana del ser y contagia todo lo que lo rodea. Estar ante un ser con el Sahasrara abierto es un inmenso placer para un ser humano sensible.